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domingo, 27 de noviembre de 2011

       Ver Vela.gif en presentaciónVer Llama.gif en presentación          Homenaje.
             Al Señor Coronel.

JORGE ROBERTO IBARZÁBAL.


VIERNES 18 de NOVIEMBRE de 2011.

 A las 18:30 Hs.en las instalaciones del CÍRCULO MILITAR. 

Sito en Avda. SANTA FE 750 de la CIUDAD DE BUENOS AIRES 
(CABA): 
A los 37 años de su vil asesinato en manos del ERP.Adhiero plenamente al homenaje a este valiente soldado del otrora glorioso Ejército Argentino. El Cnl. JORGE ROBERTO IBARZABAL tuvo que padecer un horrendo secuestro de 10 meses, luego del ataque al Regimiento de Azul (19 de enero de 1974) por parte de terroristas del ERP.
El 19 de noviembre de 1974, el Cnl. IBARZABAL era trasladado de una a otra "¿cárcel del pueblo?" dentro de un armario metálico ubicado en la caja de una camioneta. El vehículo estaba circulando por la localidad de Quilmes cuando fue sorprendido por un control policial de tránsito. Los "¿jóvenes idealistas?", eufemismo por crueles y despiadados asesinos, no se resistieron al mismo pero sí ultimaron a este dignísimo militar.

El Cnl. IBARZABAL soportó con estoicismo el cruel destino que tuvo que padecer. 
No se entregó al enemigo para salvar su vida ni vendió su alma al diablo. 
Un verdadero ejemplo para todos nosotros.
Recordemos que durante el ataque guerrillero al Regimiento de Azul, los "¿jóvenes idealistas?" mataron a un conscripto, DANIEL GONZALEZ, al Cnl. CAMILO ARTURO GAY y a su esposa, Sra. NILDA IRMA CAZAUX de GAY. 
A la Sra. de GAY estos "¿jóvenes idealistas?" la asesinaron en presencia de sus dos jóvenes hijos y ante el desesperado clamor de los mismos para que no le mataran a su madre. 
Patricia Gay, su única hija mujer, a raiz de todo esto cayó víctima de una depresión muy severa, que nunca pudo vencer y que la llevó al suicidio años más tarde. Les envío fotos de las así llamadas "¿cárceles del pueblo?", donde estuvo 10 meses el CNL IBARZABAL en condiciones infrahumanas, y una carta que el Cnl. le manda desde su injusta y cruel prisión a su hijo Robertito, quien en ese entonces era un niño. 
Allí lo orienta para que transite por la senda del honor, la decencia y la honradez. Todo un ejemplo ante la tremenda adversidad que estaba sobrellevando con tanta entereza y valor. Y es importante recordar que todo esto ocurrió dos años antes del tan denostado 24 de marzo de 1976; es decir, durante el gobierno de Juan D. Perón/María Estela Martínez de Perón.
Gobierno Constitucional, con más del 60% de los sufragios. 
Confieso que leer esa carta me hizo derramar unas cuantas lágrimas. No obstante ello, me reconfortó al advertir la gran hombría de bien de este ilustre HEROE del Ejército Argentino.
NO LO OLVIDEMOS!!!.
Que esta llama votiva y esta vela encendida que recuerdan al Cnl. IBARZÁBAL y a todos los muertos por la subversión no se extingan jamás.

El próximo 18 de noviembre gritemos a los cuatro vientos:
SR. CNL. JORGE ROBERTO IBARZÁBAL:

 PRESENTE!!!.

Por favor, difundamos este mensaje.
                                         Un cordial saludo
                                            Ma. Alejandra.

A MI QUERIDO HIJO ROBERTITO (Cárcel del Pueblo- Julio 

de 1974)
Roberto es el nombre que tu madre
Eligió par ti hijo querido.
Roberto es el nombre de tu padre
Que se fue cuando tu estabas dormido..

Ora pienso yo en mi suerte,
Ora pienso en tu destino
Yo ya estoy más cerca de la muerte
Pero tú recién inicias el camino.


Bueno es entonces que comprendas
Que tu niñez tal vez ha terminado
Y a raíz de esta circunstancia tan tremenda
El camino del hombre has iniciado.


Esto duele y provoca mi martirio
Hiere el alma como el rayo a la tormenta
Que por causas que quizás tu no comprendas
Has dejado tan pronto de ser niño.


Ruego entonces que tus pasos se encaminen
Por la senda del honor y la decencia
Y le pido a Dios que te ilumine
Para que puedas resolver sin mi presencia.


Todo tiene su final en este mundo
Incluida la injusticia, la opresión y el desatino
Lo importante es tener Fé en lo mas profundo
En que habrá de cambiar nuestro destino.


Intenta hijo querido conducirte
Como el hombre que yo quise que fueras
Y no olvides que tu madre necesita
Que la ayudes, la acompañes y la quieras.


Tienes toda la vida por delante
Sed decente, sed honrado y sed humano
Y recuerda que jamás podrás saber
Las cartas que Dios tiene en sus manos


Oro a diario para volver a verte,
Pido a Dios la dicha de abrazarte,
No resisto el dolor de este castigo
Que me priva de ti por no tenerte

Papa

Esta carta la escribió el Cnl. IBARZÁBAL durante su cautiverio 
y fue encontrada dentro de su ropa cuando lo asesinaron.

viernes, 25 de noviembre de 2011

¿Cómo ponemos los argentinos de manifiesto nuestro patriotismo?

Día de la Soberanía Nacional.

El 20 de noviembre es el día de la Soberanía Nacional, en conmemoración de la batalla de Vuelta de Obligado. El feriado se establece para el cuarto lunes de noviembre.
En camino hacia un nuevo fin de semana largo, un gran porcentaje de argentinos reconoce que ignora el motivo de la conmemoración. Pero esta no es la única efeméride que "pasa" por el calendario sin ton ni son.
El amor a la Patria es lo que se llama patriotismo, y se expresa de distintas maneras: el lucir escarapelas, colgar banderas en balcones, calles, plazas, taxis; emocionarse al cantar el Himno Nacional y gritar en las canchas: "¡Argentina! ¡Argentina!"... 
¿Somos los argentinos realmente patriotas? 
¿Por dónde pasa nuestro patriotismo?
La socióloga Graciela Romer aporta una pregunta: "¿Acaso los símbolos patrios sirven para unir más a los argentinos?". 
Un sondeo reveló que la mitad de los argentinos cree que hay más cosas que nos unen que las que nos separan, pero la otra mitad pensó lo contrario: son más las que nos separan. La mayoría cree que los unen "sentimientos comunes y la solidaridad social", luego el deporte, "los problemas", "la cultura, la tradición, la historia". Los símbolos patrios, como objeto de unidad, van últimos. 
Para Romer, "si a los argentinos los unen más la solidaridad y los problemas, se debe pensar que estas son las marcas que definen su más profunda identidad nacional".
En igual sintonía, un sondeo de opinión realizado por el Centro de Estudios Nueva Mayoría revela que algo más de la mitad de la gente dice que usa escarapela o embandera su casa en las fechas patrias.
Para Romer, la "solidaridad y los problemas" nos unen. 
Y de esto, los argentinos, tenemos real dimensión. Cuando ha sucedido una tragedia, la sociedad, el estado, las ONGs, los empresarios se ponen de acuerdo para "dar una mano" solidaria.
La historia argentina está repleta de muestras de solidaridad conmovedoras, desde el terremoto de San Juan en la década del 40, hasta las inundaciones en Santa Fe, en 2003, pasando por casos puntuales, por ejemplo, las innumerables veces que personas han caído dentro de un pozo o ante siniestros de tránsito . "La evidencia más irrefutable de esta actitud pudo verse en el terremoto de Chile, cuando una inmensa cantidad de gente se conmovió ante la tragedia y sumó su aporte solidario hacia los chilenos”, señala Jorge Elbaum, sociólogo y doctor en Ciencias Sociales.
“Creo que muchas veces se esconde la historia solidaria de nuestro país y nos autoflagelamos deteriorando nuestra autoestima, y, al mismo tiempo, desvalorizamos lo mejor que tenemos. 
Nuestra sociedad, nuestros técnicos e ingenieros, nuestro nivel tecnológico y nuestros científicos habrían entregado todo para salvar vidas y habrían hecho una tarea tan buena o mejor que la que se vio en Chile. Cuando la sociedad argentina se ha visto frente al peligro de una catástrofe, ha actuado mancomunada y solidariamente. 
Quizá ese sea uno de los capitales más positivos de nuestra sociedad. Y no hay que disminuirlo con comparaciones que buscan muchas veces deteriorar la imagen que tenemos de nosotros mismos”, destaca Elbaum en un artículo periodístico de Clarín.
La nota de la polémica la pone Romer al asegurar: “Tendemos a ser solidarios cuando respondemos, instantáneamente, a un requerimiento de alguien, pero no solemos sostener comportamientos de solidaridad. Por nuestro histrionismo, somos solidarios para mostrarnos a los demás, pero cuando no nos ven somos todo lo contrario. Por eso, cuando hay una cámara de televisión todos corremos para ver quién es el primero, pero cuando tenemos que hacer el esfuerzo para sostener esa solidaridad, la participación se reduce considerablemente”. 
En este sentido, muchos piensan que suele predominar la cultura individualista, y sólo se piensa en términos solidarios ante la catástrofe: "son espasmos de solidaridad. Hemos tenido varias experiencias –como Cromañón y Malvinas− donde se ha demostrado la solidaridad en el momento, pero luego va desapareciendo”, afirma Martín Sivak.
 “En la Argentina, no queda claro quién da las órdenes ante la emergencia. 
Suele haber motorización política de los esfuerzos: se privilegia quien se saca la foto en relación con las campañas políticas eventuales”, señala Sivak.
 El sociólogo entiende que “una catástrofe pone en juego la madurez de un país, porque requiere dejar de lado los individualismos y sirve para evaluar cómo funciona una sociedad”. 
Los argentinos podemos hacerlo, somos capaces, solo tenemos que comprometernos más con las causas.

¿Cómo ponemos los argentinos de manifiesto nuestro patriotismo?

Día de la Soberanía Nacional.
El 20 de noviembre es el día de la Soberanía Nacional, en conmemoración de la batalla de Vuelta de Obligado. El feriado se establece para el cuarto lunes de noviembre. En camino hacia un nuevo fin de semana largo, un gran porcentaje de argentinos reconoce que ignora el motivo de la conmemoración. Pero esta no es la única efeméride que "pasa" por el calendario sin ton ni son.
 
El amor a la Patria es lo que se llama patriotismo, y se expresa de distintas maneras: el lucir escarapelas, colgar banderas en balcones, calles, plazas, taxis; emocionarse al cantar el Himno Nacional y gritar en las canchas: "¡Argentina! ¡Argentina!"... ¿Somos los argentinos realmente patriotas? ¿Por dónde pasa nuestro patriotismo?
 
La socióloga Graciela Romer aporta una pregunta: "¿Acaso los símbolos patrios sirven para unir más a los argentinos?". Un sondeo reveló que la mitad de los argentinos cree que hay más cosas que nos unen que las que nos separan, pero la otra mitad pensó lo contrario: son más las que nos separan. La mayoría cree que los unen "sentimientos comunes y la solidaridad social", luego el deporte, "los problemas", "la cultura, la tradición, la historia". Los símbolos patrios, como objeto de unidad, van últimos. Para Romer, "si a los argentinos los unen más la solidaridad y los problemas, se debe pensar que estas son las marcas que definen su más profunda identidad nacional".
En igual sintonía, un sondeo de opinión realizado por el Centro de Estudios Nueva Mayoría revela que algo más de la mitad de la gente dice que usa escarapela o embandera su casa en las fechas patrias.
Para Romer, la "solidaridad y los problemas" nos unen. Y de esto, los argentinos, tenemos real dimensión. Cuando ha sucedido una tragedia, la sociedad, el estado, las ONGs, los empresarios se ponen de acuerdo para "dar una mano" solidaria.
 
La historia argentina está repleta de muestras de solidaridad conmovedoras, desde el terremoto de San Juan en la década del 40, hasta las inundaciones en Santa Fe, en 2003, pasando por casos puntuales, por ejemplo, las innumerables veces que personas han caído dentro de un pozo o ante siniestros de tránsito . "La evidencia más irrefutable de esta actitud pudo verse en el terremoto de Chile, cuando una inmensa cantidad de gente se conmovió ante la tragedia y sumó su aporte solidario hacia los chilenos”, señala Jorge Elbaum, sociólogo y doctor en Ciencias Sociales.
 
“Creo que muchas veces se esconde la historia solidaria de nuestro país y nos autoflagelamos deteriorando nuestra autoestima, y, al mismo tiempo, desvalorizamos lo mejor que tenemos. Nuestra sociedad, nuestros técnicos e ingenieros, nuestro nivel tecnológico y nuestros científicos habrían entregado todo para salvar vidas y habrían hecho una tarea tan buena o mejor que la que se vio en Chile. Cuando la sociedad argentina se ha visto frente al peligro de una catástrofe, ha actuado mancomunada y solidariamente. Quizá ese sea uno de los capitales más positivos de nuestra sociedad. Y no hay que disminuirlo con comparaciones que buscan muchas veces deteriorar la imagen que tenemos de nosotros mismos”, destaca Elbaum en un artículo periodístico de Clarín.
 La nota de la polémica la pone Romer al asegurar: “Tendemos a ser solidarios cuando respondemos, instantáneamente, a un requerimiento de alguien, pero no solemos sostener comportamientos de solidaridad. Por nuestro histrionismo, somos solidarios para mostrarnos a los demás, pero cuando no nos ven somos todo lo contrario. Por eso, cuando hay una cámara de televisión todos corremos para ver quién es el primero, pero cuando tenemos que hacer el esfuerzo para sostener esa solidaridad, la participación se reduce considerablemente”. En este sentido, muchos piensan que suele predominar la cultura individualista, y sólo se piensa en términos solidarios ante la catástrofe: "son espasmos de solidaridad. Hemos tenido varias experiencias –como Cromañón y Malvinas− donde se ha demostrado la solidaridad en el momento, pero luego va desapareciendo”, afirma Martín Sivak.
 “En la Argentina, no queda claro quién da las órdenes ante la emergencia. Suele haber motorización política de los esfuerzos: se privilegia quien se saca la foto en relación con las campañas políticas eventuales”, señala Sivak.
 El sociólogo entiende que “una catástrofe pone en juego la madurez de un país, porque requiere dejar de lado los individualismos y sirve para evaluar cómo funciona una sociedad”. Los argentinos podemos hacerlo, somos capaces, solo tenemos que comprometernos más con las causas.